DESPLIEGA PESTAÑA

lunes, 21 de octubre de 2013

ANA Y EL REY

Es una historia situada en la Tahilandia de fines del siglo XIX, y narra las aventuras de la institutriz británica Anna Leonowens, contratada por el Rey de Siam para que educara a sus hijos. “Comienza diciéndome aquello que no me quieres decir” dirá Anna al rey. El silencio del amor, casi sin palabras, ellos se entienden, se comunican, se adoran. En el plató de Anna y el Rey, en el ardiente corazón de Malasia, todos los ojos se volcaron en la química entre Foster y Chow. Tennant dice: "Los puedes ver pensando y sintiendo por todos los rincones. Se trata de algo sutil. Cada escena tiene un texto subyacente que está siendo interpretado y que no tiene nada que ver con lo que están diciendo. Verlo es algo extraordinario" La dialéctica entre dos seres diferentes que están destinados a unirse espiritualmente en un situación desesperada a causa de las dificultades culturales y familiares de ambos. La maestra británica, es el eje y el espejo donde el rey se mira (y se enamora) para saber de occidente, y de su filosofía occidental. La lentitud de las escenas y el abigarramiento en la ornamentación y en la vida de unos seres apartados del mundo en un pequeño país de fábula, permiten reflexionar sobre la importancia del baile como recurso de entrega, cuando no hay otra solución para unirse a la persona amada. Y la música y el agua y el misterio que irradian los budas y los salones orientales y, también, a veces la disciplina severa capaz de llevar hasta la crueldad y la esclavitud. Se salva el Rey como personaje de la película, que con sus pies descalzos y su figura elegante y parsimoniosa encaja divinamente con el papel que representa. Las palabras del Rey Mongkut suenan verdaderas:'Si conseguimos que sean nuestros amigos, ¿no estaremos eliminándolos como enemigos?'.Es para enamorarse como se “enamoró” la institutriz(Jodie Foster ) del Rey (Chow Yun-Fat). Un cuento para ilusionarse, para pensar que el amor siempre triunfa.

No hay comentarios: